Héroe y dragón se
enfrentaban de nuevo. Se conocían bien, habían batallado antes tantas veces... Y
tantas veces regresaron a su castillo, a su caverna, con heridas sangrantes en
el cuerpo cicatrizadas con rapidez y vacíos en el alma imposibles de recuperar…
Así
seguiría siendo hasta el fin de los tiempos, mientras la princesa no terminara
de decidirse por el apasionado fuego del dragón o la suave calma
del héroe.
43 #setentapalabras
© JM Jurado