25/2/22

El tirador

Apostado en la azotea del edificio, acaricia su arma mientras observa los movimientos de la muchedumbre en la calle. El tirador tiene su código de conducta: nunca dispara a niños y raramente a ancianos. 

Ha elegido a dos objetivos, escogidos por sus caras de desdichados. Apunta y descarga. Pero esta vez uno de los disparos impacta sobre una persona equivocada. “Si no se movieran tanto”, piensa Cupido recargando su arco.

106#setentapalabras
© JM Jurado